Es la simiente comestibles del árbol del avellano.Como todos los frutos secos tienen un alto valor calórico, 565 calorías por cada 100 g., además de ser ricas en sales minerales, potasio, calcio, fósforo, hierro y vitaminas A y C. Además de consumirse cruda o tostada para picoteo, se utiliza en repostería, helados, turrones, chocolates.
En Asturias el avellano estaba ligado a las brujas y xanas. Se creía, además, que las varas verdes servían para matar víboras; por ello se rodeaba con ellas los jardines y fincas, para que no entraran. Las hojas verdes del avellano servían para curar heridas y los zahoríes las empleaban para encontrar aguas subterráneas. La avellana tiene su fiesta en Infiesto y en Pola de Allande, la Virgen del Avellano. En las fiestas se venden en cartuchos de papel y se les llama pendones. Las avellanas se utilizan en la culinaria asturiana y española en general para picoteo, dulces, mezcladas con el chocolate...