Color negro. Es muy poco habitual la existencia de este color en cocinas y utensilios, aunque como elemento decorativo está más presente. Desde la antigüedad se ha relacionado el color negro en los alimentos como algo oscuro y sucio, sin embargo, actualmente el color negro se ha convertido en un color estético, que al combinarlo con otros alimentos no afecta a su sabor pero que por el contrario sí que reduce sus propiedades, por lo que se debe tener en cuenta con qué tipo de alimentos mezclamos este color.
Los alimentos negros no tienen ningún beneficio especial, aunque sí que están especialmente indicados para proteger el estómago y los órganos del cuerpo de posibles infecciones.
Los principales ejemplos de alimentos negros son las trufas negras, los hongos y las setas, así como algunos alimentos demasiado tostados. La tinta de los calamares convertitda en salsa o como aditamento en pastas alimenticias que adquieren ese color negro.
El exceso de tostado en carnes, pescados, verduras y panes, obtenidos por efectos de planchas, tostadoras y hornos, se considera que puede tener efectos cancerígenos.
Ver La Cromoterapia en la alimentación.