- Lava los tomates, elimina los tallos, pélalos y córtalos en trozos.
- Licua los tomates y distribuye el zumo en cuatro vasos.
- Sazona con sal y una pizca de pimienta blanca.
- Agrega una cucharadita de hielo picado y mezcla bien.
- El tabasco que es picante, será optativo, pero una gotita en cada vaso le da un gusto muy especial.
Conviene pelar los tomates, ya que su piel aunque se lave mantiene los posibles pesticidas y además puede resultar irritante para muchas personas.