- Vierte el aceite en una sartén pequeña antiadherente.
- Casca los dos huevos, bátelos ligeramente y agrega una pizca de sal.
- Calienta a fuego medio el aceite y cuando esté muy caliente vierte el batido de huevos.
- Cuando veas que el borde del batido de huevos se cuaja empieza a volcar hacia el centro los bordes de la tortilla con ayuda de una espátula ancha y corta.
- Cuando ya esté recogido todo el batido de huevos hacia el centro dale la vuelta poco a poco para que termine de cuajarse.
- Pásala a un plato.
Hacer una tortilla francesa bien, no resulta a veces tan fácil.
Es fundamental: batir poco los huevos; sartén antiadherente; no pincharla para que cuaje antes por dentro; no aplastarla con el tenedor. Hay veces que quedan como suelas. Las tortillas francesas deben quedar jugosas y esponjosas y no excesivamente cuajadas por dentro, a no ser que no guste el huevo poco hecho.
Se pueden hacer con trocitos de espárragos blancos o verdes; con bonito en aceite (bien escurrido del aceite de su conserva); con setas.