- Limpia los mejillones y ponlos en una cazuela con litro y medio de agua. Deja cocer hasta que se abran.
- Separa los mejillones de las valvas quitándoles las hebras.
- Cuela el caldo de cocción de los mejillones pero utiliza una manga de tela.
- Abre las vieiras y separar la carne de los corales.
- En una cazuela vierte el aceite, la cebolla picada, el tomate pelado y cortado en trozos, la zanahoria raspada y cortada en rodajas y sal.
- Sofríe diez minutos, añade la mitad de los mejillones y los corales, el caldo de cocción de los mejillones previamente colado por una manga de tela y las hebras de azafrán.
- Tapa la cazuela y deja cocer a temperatura media durante veinticinco-treinta minutos.
- Tritura todo con el brazo de la batidora hasta que quede una crema fina.
- Agrega las vieiras cortadas en trocitos.
- Vuelve a poner al fuego y a los cinco minutos añade los mejillones picaditos.
- Sirve caliente y si quieres acompaña con unos daditos de pan frito.
Cuando compres pescado blanco aprovecha las cabezas, espina central y raspas para hacer un caldo de pescado (fumet) y una vez colado y frío, congélalo y aprovéchalo para cuando hagas una sopa de pescado o un arroz de marisco.