- Brida las pechugas de pollo y sazona con sal.
- Enharínalas.
- En una sartén vierte el aceite, la cebolla muy picada y la zanahoria rallada. Calienta a fuego mediano hasta que la cebolla esté suave.
- Coloca las tres pechugas de pollo y dóralas.
- Agrega un vaso de agua y el vinagre y cuécelas quince minutos.
- Añade las fresas lavadas, cortadas en dos o tres trozos y deja que cuezan diez minutos más a fuego muy suave. Mientras dure la cocción gira las pechugas a menudo.
- Para servir desbrida las pechugas y córtalas en lonchas. Rodea con la salsa sin pasar.
La salsa la puedes hacer con otras frutas como albaricoques, melocotones, manzanas.