- Pela las gambas y saltéalas con los guisantes, el jamón picadito y un poquito de aceite.
- Divide el salteado entre cuatro cazuelitas de barro individuales y casca un huevo encima sazonándolo con sal. Coloca dos yemas de espárragos en cada cazuelita.
- Cubre las yemas con medio cascarón de huevo y hornea a 180ºC hasta que la clara esté blanca.
-Retira los cascarones y sírvelos recién hechos acompañados de un triángulo de pan frito.
Puedes poner dos huevos por cazuelita sin son para adultos.