- Lava las berenjenas y elimina los tallos.
- Corta a lo largo y extrae la pulpa con un cuchillo de punta fina dejando medio centímetro adherida a la piel. Ponla en un cuenco y la cubres con agua.
- Cuece diez minutos con agua y sal las cuatro mitades vacías de las berenjenas. Escúrrelas colocándolas boca abajo sobre papel absorbente de cocina.
- En una sartén pon tres cucharadas de aceite, la cebolla picada y el ajo picadito.Sofríe a fuego muy suave durante diez minutos.
- Añade la pulpa de la berenjena escurrida y cortada en trocitos muy pequeños. Saltea durante diez minutos y añade la carne picada. Mezcla bien y mantén la cocción hasta que la carne esté hecha y haya perdido todo el agua que la berenjena haya soltado.
- En otra sartén pon dos cucharadas de aceite y la harina. Mezcla bien en frío y sazona con.sal.Vierte la leche poco a poco y remueve con las varillas manuales hasta terminarlas.
- Ponla a cocer a fuego medio sin dejar de remover hasta que empiece a espesar y entonces baja el fuego al mínimo. El tiempo de cocción total será de veinte minutos.
- Añade a la besamel la mezcla de carne y berenjena utilizando la espumadera para que suelte el resto de grasa que pueda tener. - Mezcla bien, añade el tomate frito y rectifica el punto de sal. Deja templar diez minutos.
- Coloca las cuatro mitades de las berenjenas en una fuente de horno y rellénalas con la mezcla. - Espolvorea la superficie con el queso rallado.
- Gratina en el horno a 200ºC hasta que estén doradas.Sirve recién hechas.
El relleno lo puedes modificar poniendo 100 g. de carne de cerdo picada mezclada con 50 g. de jamón serrano cortado en trocitos muy pequeños.