Son las simientes de algunos árboles: el almendro (las almendras), el avellano (las avellanas), el alfóncigo (los pistachos), el castaño (las castañas), el nogal (las nueces) y el pino (los piñones).
Todas estas semillas se consumen desde hace siglos, porque además que se conservan muy bien, tienen unas propiedades nutritivas excelentes; gran valor energético por su alto contenido en proteína de alta calidad y a su nivel de grasa, calcio y ácido fólico.
Se consumen como aperitivo o picoteo pero en España se utilizan mucho para añadir a platos dulces y salados, bien enteros o machacados.