Aunque suene a producto pasado de moda, o ancestral, la verdad es que en la zona levantina siguen secando los tomates al sol.
Dado que están deshidratados su sabor está mucho más concentrado y es estupendo para todo tipo de salsas y sofritos que lo tenga como ingrediente. También es idóneo para el sofrito de una paella, sopa de pescado, bullabesa, bacalao...
Se puede utilizar directamente o bien ponerlo en remojo con agua fría durante dos horas. Se escurre y se utiliza como el tomate normal, pero su sabor es muy especial. Además tiene la ventaja de que teniendo en casa un envase nunca va a faltar el tomate para preparar una salsa o sofrito. Lo comercializan empresas valencianas y se encuentran en los buenos supermercados y en las grandes superficies.