Más del 50% de las intoxicaciones se producen por la mala manipulación de los alimentos en la cocina de los hogares, además de la falta de higiene de utensilios, paños de cocina, conservación de los alimentos, lavado de frutas y verduras... Para evitar todas estas costumbres incorrectas hay que concienzarse de que la cocina es un laboratorio donde se elaboran platos estupendos, pero también puede ser un lugar donde se generan intoxicaciones, algunas de ellas muy graves. El Calor ambiental, enemigo de la cocina Aunque parezca un contrasentido el calor es enemigo y amigo de la cocina. Amigo, porque es necesario para elaborar muchos alimentos, pero el calor ambiental del verano es causa de muchas intoxicaciones que hay que evitar. Algunas medidas que hay que tomar son: - Estar seguro que el agua del grifo es potable y está en buenas condiciones. - Lavar todas las frutas y verduras. - Las verduras de hoja hay que sumergirlas en agua fría y unas gotas de vinagre que actúa de insecticida para los numerosos insectos que se suelen encontrar en los pliegues de sus hojas. Acláralas muy bien antes de prepararlas y más si se van a consumir en crudo. - NO ROTUNDO a preparar carnes y pescados crudos o a elaborar platos con huevos sin freir o cocer. La moda de medio cocer algunos alimentos no hay que tenerla en cuenta durante los meses de calor. - No acumules comida preparada y menso dejándola al aire. Tapa la comida que prepares con antelación y guárdala en el frigorífico inmediatamente. - Si habitualmente no lo haces, en verano utiliza papel de cocina, de usar y tirar, y evita los paños de cocina lo más que puedas.