La filosofía es la misma que la técnica de plancha eléctrica, y se suele utilizar una sartén de base ondulada, de manera que los canales hundidos sirvan de depósito de la grasa sobrante y a la vez transmitan el calor, además de proporcionar el clásico rallado de las superficies hechas a la plancha.
Estas sartenes destinadas a cocinar a la plancha deberás estar siempre impecables ya que si el fondo está un poco desgastado, los alimentos se pegarán y se añadirá un exceso de grasa, por lo que el objetivo final de cocianr a la plancha, que es cocinar sin apenas grasa no se consigue.
El resultado final va a depender del tipo de calor utilizado: gas, vitrocerámica, inducción o eléctrico tradicional y de la pericia del cocinero/a para manejar la temperatura.
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