Vierte las dos clases de leche en un cazo de fondo antiadherente.
Calienta a fuego suave y remueve hasta que veas que coge un color amarronado, es decir se forme un manjar blanco.
Agrega las gotas de esencia de almendra, mezcla bien y vierte en un bol grande.
Espera unos segundos a que se entibie el manjar blanco y agrega las yemas de huevo batidas con la vainilla en polvo y mezcla rápidamente para que éstas no se cuajen.
Distribuye en cuatro copas individuales amplias y deja que se enfríe del todo.
Pon el azúcar y el oporto en un cacito y cuece a fuego suave para que se haga un almíbar. Remueve .
Mientras tanto bate las claras de huevo con las varillas eléctricas hasta que queden muy duras.
Vierte poco a poco el almíbar de Oporto sin dejar de batir hasta que esté frío el merengue.
Distribuye encima del manjar blanco y espolvorea con una pizca de canela molida.
Sirve muy frío.
Este delicioso postre peruano se llama así en homenaje a la forma de suspirar de la mujer limeña, o sea, dulce.