- Corta en trozos la pulpa de la sandía y el melón , con cuidado de eliminar bien todas las pepitas.
- Ponlos en un cuenco amplio y espolvoréalos con el azúcar y riega con el zumo de limón.
- Deja macerar dos horas en la nevera.
- Transcurrido este tiempo tritura hasta hacer una crema fina.
- Distribuye en cuatro copas o vasos de cristal.
- Optativo: adorna con una bolita de melón y otra de sandía insertadas en una brocheta de madera.