- Limpia los níscalos, cortando el extremo de los tallos y córtalos con los dedos en trocitos no muy grandes. Espolvoréalos con un diente de ajo prensado y reserva.
- En la paella o cazuela donde vayas a preparar el arroz, vierte tres cucharadas de aceite, un diente de ajo prensado, el medio higadito del conejo y sal.
- Sofríe a fuego mínimo tres minutos.
- Mientras tanto lava los trocitos de conejo, sazónalos con sal y agrégalos a la paella. Sube un poco el fuego y dóralos.
- Cuando estén dorados agrega el azafrán, el pimiento morrón cortado en tiritas finas y cortas, el orégano y el pimentón, remueve rápidamente y cubre con seis tazas de agua (la medida de la taza será la misma que utilizarás para el arroz).Cuece durante veinte minutos a fuego medio.
- Agrega los níscalos y mézclalos con el conejo.
- Sube el fuego al máximo y cuando el caldo haya recuperado el hervor fuerte agrega el arroz en forma de lluvia y remueve sólo una vez.
- Prueba el caldo y comprueba el punto de sal que deberá estar muy sabroso.
- Mantén la cocción a fuego vivo diez minutos, transcurrido este tiempo bájalo poco a poco hasta completar diez minutos más, terminando la cocción a fuego mínimo.
- Apaga el fuego, tapa el arroz con dos paños de cocina limpios y deja que repose diez minutos.
- Sirve al momento.
Este es un plato único completo. Puede sustituir el conejo por pollo y se elabora de igual manera.